Salimos de Montevideo a las 15:30 con Tizi y Emi en un bus que no recuerdo la empresa! y tranqui nos fuimos tomando unos mates hasta llegar al bello y huracanado balneario Piriápolis, en donde todo se llama Pirialgo... Peinados Piria, Inmobiliaria Piriápolis, Helados el Piria, etc... si no es así es porque te cambiaste de balneario!!!
Luego de inscribirnos y demás petates empezamos a buscar y reclutar a los orugas que andaban en la vuelta, es así que dimos con Virginia y el dúo dinamita de Clau y Lucy para más adelante reencontrarnos gustosamente con el señor Ráfaga Rastrera que regresaba a las rutas luego de largos 4 meses!
Minutos antes de la largada y aguantando el terrible garque de Emi que no dejaba de expresar su estado diarréico con respecto al ansiado DEBUT, metimos un cacho de fiesta en la apretada largada, apretada de verdad, se podía oler los cuerpos de varios competidores debido a la cercanía, tanto es así que Tizi cayó desmayado merced de un par de gases y hedor a ser humano...
Alex fue otro de los que estuvo y como siempre NO PARÓ de hablar blar blar blar!!! jajajajajjajja
Luego de la llegada tuvimos el placer de encontrarnos a la familia Samudio Baumann y sus Orugas Moni, Lali y Fede quienes expresaron su amor por la carrera aunque con caras de tomuer!!!
Nuestros tiempos fueron los siguientes (netos)
Mili: 54:53
Lucy: 1:12:29
Clau: 55:29
Vir: 41:17
Moni: 1:01:41
Ráfaga: 42:34
Tachu y Tizi: 50:46
Fede: 46:08
Emi Nuevito: 44:04
Alex: 33:19
Lali: 40:42
Felicitaciones a TODOS por estar y completar esta difícil y hermosa travesía!!!
Mi carrera:
Encarar una subida al cerro con el cochecito es todo un desafío, con todo lo que significa intentar correr cuidando muchísimas cosas, la gente, la calle, el acantilado del costado, los que siempre se cruzan y fuerzan frenadas de golpe, esquivar a quienes optan por caminar, etc... fue una gran experiencia que me sentí tan a gusto al poder llegar a la cima que exprese a viva voz: "Llegué la R.P.M.!!!", acto seguido llegó la bajada... no se me veían las patas pero puedo asegurar que fue mucho pero mucho más difícil y cansadora que la subida ya que nualquier mal movimiento podía llevar a volcar el coche con su contenido...
Una vez llegados al pie del cerro pudimos corretear cual libres libélulas hasta la llegada para alzar los brazos al cielo y exclamar: "PUDIMOS!"
Será hasta la próxima largada!
Redactor Irresponsable: Tachu